Gestión de equipos: cómo dar feedback positivo

La gestión de equipos es una tarea que puede presentar numerosos retos. Los líderes de hoy en día deben ser capaces de dirigir en entornos cambiantes y diversos, donde conviven personas con diferentes personalidades, habilidades y perspectivas. Afrontar esta diversidad de manera personalizada, pero al mismo tiempo justa para todos, no es sencillo, especialmente si se busca mantener un clima laboral positivo.

En este contexto, la comunicación efectiva se posiciona como la clave de cualquier relación humana. Para los líderes, resulta esencial saber expresar tanto los errores como los logros de sus empleados de manera constructiva. Pero ¿cuáles son las claves para proporcionar feedback positivo de forma adecuada?

Antes de abordar estas estrategias, es importante entender qué es el feedback positivo. Este se define como una comunicación efectiva y retroactiva que tiene como objetivo mejorar un proceso, actitud o desempeño. Su propósito no es solo señalar las áreas de mejora, sino también reconocer las fortalezas y contribuciones positivas de los empleados.

Para las empresas y los equipos, este tipo de comunicación se traduce en mayores niveles de productividad. Cuando los trabajadores perciben que no solo se valoran sus puntos débiles, sino también sus aportes positivos, su rendimiento tiende a mejorar. Además, el feedback positivo fomenta la motivación y el compromiso al abordar los desafíos desde una perspectiva constructiva. Este enfoque impacta directamente en el estado de ánimo de los empleados, generando un mejor clima laboral.

Las tres claves para dar feedback positivo a tu equipo

1. El feedback positivo debe ser una práctica habitual en tu empresa. Se trata de una herramienta esencial para motivar a los trabajadores, mejorar el ambiente laboral y fomentar el crecimiento personal y profesional. Es importante que esta práctica se realice con regularidad y no únicamente como respuesta a grandes logros, ya que también puede servir para resaltar pequeños avances que suelen pasar desapercibidos. 
2. Evitar dar feedback positivo cuando el empleado se encuentre en estados emocionales alterados. Las emociones intensas, como la euforia, la tristeza o el enfado, pueden hacer que las personas no estén centradas en la conversación real y esto hace que el mensaje pierda efectividad. Por ejemplo, un comentario impulsivo puede ser malinterpretado o, en el peor de los casos, dañar la relación con el equipo. Por ello, es fundamental mantener la calma y esperar a un momento adecuado para ofrecer retroalimentación constructiva que inspire confianza y profesionalidad.
3. El feedback positivo busca hacer énfasis en lo bueno. La clave está en equilibrar los comentarios destacando primero un punto positivo, luego señalando un área de mejora, y finalizando con otro punto positivo. Este enfoque, conocido como la "técnica del sándwich", permite suavizar la crítica, enfocándola como una oportunidad de aprendizaje en lugar de un reproche. Así, el empleado se sentirá más valorado y motivado para mejorar, lo que reforzará su autoestima mientras trabaja en su desarrollo.

Ejemplos de cuándo puede ser un buen momento para dar feedback positivo

• Reconocer los logros al terminar un proyecto: cuando un equipo finaliza un proyecto importante, es el momento ideal para destacar tanto los resultados obtenidos como equipo, como los esfuerzos individuales. Por ejemplo, si un empleado ha demostrado una actitud proactiva o ha resuelto un problema con éxito, este es el momento de mencionarlo. Reconocer estas acciones de manera puntual refuerza el compromiso de los trabajadores.
• Celebrar pequeños avances: no es necesario esperar a que los empleados logren metas grandes para dar un feedback positivo. Resaltar los pequeños logros también tiene un gran impacto. Este tipo de retroalimentación demuestra que se perciben y valoran incluso los esfuerzos más sutiles.
• Durante reuniones individuales: las reuniones 1:1 son una gran oportunidad para ofrecer feedback positivo. Este espacio permite personalizar el mensaje y generar un ambiente de confianza. Además, al ser un entorno privado, el empleado puede sentirse más cómodo para recibir y procesar los comentarios.
• En momentos de cambio: cuando una compañía atraviesa cambios importantes, como una reestructuración o la implementación de nuevos procesos, dar feedback positivo es crucial para mantener la motivación. Por ejemplo, si un equipo logra adaptarse rápidamente o enfrenta los cambios con actitud positiva, este esfuerzo debe ser reconocido.
• Después de superar un conflicto: si un equipo o empleado resuelve una situación difícil, como un desacuerdo interno o un problema con un cliente, es importante dar feedback positivo. Reconocer la capacidad de resolución y la colaboración en momentos complejos fomenta la confianza.

Errores más comunes al dar feedback positivo y cómo evitarlos

Aunque el feedback positivo es una gran herramienta, también puede perder efectividad si no se utiliza correctamente. Algunos errores frecuentes incluyen:

• Ser demasiado genérico: frases como "buen trabajo" o "bien hecho" carecen de impacto si no van acompañadas de ejemplos concretos. Para evitarlo, intenta ser específico y describe con detalle qué ha hecho bien el profesional y por qué ha sido importante para el equipo.
• No ser constante: el feedback positivo debe ser una práctica que perdure en el tiempo, no algo ocasional. Si los equipos solo reciben retroalimentación positiva de vez en cuando, pueden sentir que sus esfuerzos no son valorados de forma regular.
• No personalizar el mensaje: cada persona tiene motivaciones y valores diferentes. Personaliza cada discurso para que tenga mayor impacto y valor para cada profesional.

En definitiva, el feedback positivo es una forma de motivar al equipo para mejorar esos aspectos en los que sea necesario y ensalzar los puntos fuertes de cada trabajador, siempre desde una perspectiva optimista y dando oportunidad a los demás a expresarse. Tanto la empresa como sus profesionales se pueden beneficiar de esta técnica ya que ayuda a incentivar un clima laboral positivo, cercano y transparente. 

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