Por un verano sin estrés. Consejos para reducir el burnout laboral y mejorar nuestra salud mental

El estrés laboral es una preocupación importante para los/as trabajadores/as de toda Europa. Con la llegada del verano, son muchos los/as profesionales que sienten la presión de gestionar una gran sobrecarga de trabajo antes de poder disfrutar de unas merecidas vacaciones, e incluso algunos/as se van sin haber gestionado todo. Esta situación puede generar altos niveles de estrés y ansiedad, afectando tanto a nuestra salud mental y a la productividad como el bienestar del equipo de trabajo, incluso puede afectar al ya conocido “Burnout laboral”. 

Las empresas deben marcar la diferencia a la hora de reducir el estrés en el lugar de trabajo y saber cómo responder ante esta situación. Por ello, desde Michael Page exploramos las principales causas del agotamiento de los/as empleados/as y analizamos algunas soluciones prácticas al estrés laboral para hacer frente a este reto. 

¿Qué efectos pueden producirse sobre los/as trabajadores/as por una sobrecarga de trabajo? 

Durante ciertos picos de actividad, como en el periodo pre-vacacional, pueden generarse cargas de trabajo que desencadenan una serie de efectos relacionados con el agotamiento, como son: 

1. Ansiedad y estrés: los equipos de trabajo sienten la presión de tener todas sus tareas hechas para antes del periodo vacacional. Esto hace que la presión y ansiedad aumenten el estrés laboral, lo que pueden derivar en el famoso “burnout laboral”. De hecho, según datos de nuestro Candidate Pulse, el 50% de los/as profesionales españoles/as encuentran su trabajo estresante, incluso el 29% apunta a esta sobrecarga de trabajo como la razón principal. Además, solo el 21% de los/as trabajadores/as asegura que sus empresas les ofrecen apoyo en materia de salud mental. 
2. Problemas físicos: al gestionar esta sobrecarga de trabajo en un período de tiempo reducido, es probable que los/as empleados/as se queden trabajando más tiempo afectando así a sus horas de sueño y provocando problemas de fatiga o dolores musculares. 
3. Problemas sociales: estos picos de actividad pueden afectar negativamente al balance entre el trabajo y la vida personal, debido a la falta de tiempo y energía para dedicarle a las relaciones familiares y amistades. Esto no se limita al ámbito personal, pues las dinámicas laborales con la empresa y compañeros/as pueden deteriorarse, al igual que afecta a la satisfacción y rendimiento laboral. 

Consejos prácticos para reducir el estrés laboral 

Es importante que las empresas se aseguren de velar tanto por la salud mental como física de sus trabajadores/as. El bienestar de estos/as constituye un pilar igual de prioritario que cualquier otra preocupación organizacional. Existen muchas soluciones prácticas para manejar el agotamiento y estrés laboral que se pueden poner en práctica para crear un lugar de trabajo más feliz y saludable: 

1. Aumentar el reconocimiento: la falta de reconocimiento causa un estrés considerable a 1 de cada 4 empleados/as. Para solucionarlo, los/as directivos/as pueden reconocer regularmente el trabajo y los logros de su equipo. Poner en marcha un programa de reconocimiento es una forma eficaz de celebrar los hitos destacados y demostrar a los/as trabajadores/as que se les valora.  
2. Aliviar la carga de trabajo: identifica las áreas en las que se pueda simplificar procesos, suprimir reuniones innecesarias y dar así un respiro a la plantilla. Algunas estrategias pueden ser promover pausas regulares o la posibilidad de una semana laboral de 4 días, que ha dado resultados prometedores en ensayos recientes. Los/as empleados/as declararon haber sufrido menos estrés laboral y gozar de mejor salud mental mientras que las compañías mantuvieron su productividad. 
3. Dar prioridad a la conciliación: según nuestro Candidate Pulse, el 54% de profesionales españoles/as ve el trabajo remoto menos estresante. Las empresas pueden considerar la posibilidad de ofrecer opciones de trabajo flexible o a distancia para ayudar a sus trabajadores/as a conciliar mejor su vida profesional y personal. Sin embargo, la conciliación va más allá de la mera ubicación: se trata de proporcionar a las personas el apoyo que necesitan para prosperar estén donde estén.  
4. Fomentar una comunicación directa, abierta y clara: en situaciones como esta, es esencial mantener una comunicación efectiva y transparente para evitar malentendidos. Por eso, los/as directivos/as pueden ponerse en contacto periódicamente con los miembros de su equipo para preguntarles cómo les va. En estas conversaciones informales, se pueden hacer preguntas concretas sobre la carga de trabajo, los plazos y cualquier otro obstáculo al que se enfrenten los/as empleados/as. Estas sesiones deben ser espacios seguros en los que los/as profesionales se sientan libres para hablar de las presiones del trabajo de forma constructiva.  

Aunque es inevitable el estrés en el trabajo, con el verano acercándose, las empresas deben ser proactivas y ayudar a sus trabajadores/as a reducir dicho estrés para mejorar así su satisfacción y bienestar y evitar el burnout laboral. 

Si deseas conocer más acerca de cómo gestionar a los equipos de trabajo y contratar nuevo talento para tu plantilla, ponte en contacto con nosotros.