A estas alturas no queda empresa que no sea consciente de la importancia de tener un equipo de IT y digital sólidos para hacer frente a todos los retos derivados de la digitalización. Pero, aunque existe una fuerte demanda de los perfiles tecnológicos a nivel general hay algunos que, por sus características, se han convertido prácticamente en imprescindibles dentro de las compañías. Uno de ellos es el de programador, cuya demanda ha aumentado en torno a un 38% a raíz de la pandemia.

Los programadores son los responsables de desarrollar páginas web, aplicaciones para móviles, programas de ordenador o de ciberseguridad. ¿Y qué se necesita para esta posición? Aunque existen diferencias en función del perfil, a nivel general las compañías demandan habilidades técnicas, como especialización en un lenguaje de programación, habilidad de aprendizaje sobre nuevas tecnologías o capacidad para interpretación de la tecnología, así como soft skills como capacidad de análisis y de escucha o aptitud para trabajar en equipo en entornos colaborativos.  

El salario para estos perfiles, según nuestro Estudio de Remuneración 2021, oscila entre los 18.000 y 32.000 euros anuales para los perfiles con menos de dos años de experiencia y entre 40.000 y 65.000 euros al año en el caso de los que cuentan con más de 10 años.

El programador front-end o el encargado de la experiencia de usuario

Los programadores front-end son los encargados de mejorar la usabilidad de las páginas web y pueden tener un impacto positivo en las interacciones de los usuarios. 

¿Qué tipo de empresas demandan programadores front-end? Destacan, sobre todo, aquellas que comercializan productos a través de su web, desarrollan productos de SaaS (software as a service), basan negocio en un marketplace o quieren aumentar la visibilidad de sus plataformas.

En cuanto a las tecnologías más solicitadas para este perfil destacan Angular, React, VueJS y Node.

Programadores back-end, los responsables de que los sistemas funcionen

Por su parte, los programadores back-end se encargan del software de los sistemas y aplicaciones para que éstos se ejecuten correctamente y su función es clave para escalabilidad de los negocios.

Aunque la demanda de los perfiles back-end se extiende a todo tipo de negocios, es especialmente significativa en grandes empresas, compañías del sector industrial, relacionadas con la robótica, la automatización y la Industria 4.0, así como en grandes plataformas tecnológicas que necesitan una rápida interacción con el usuario.

¿Cuáles son las tecnologías más demandadas para los perfiles de back-end? Destacan principalmente Java, php, .NET, Python, C y C++.

Cómo hacer que tu empresa sea atractiva para los programadores

La alta demanda de perfiles IT ha provocado una gran competencia entre las empresas para captar este tipo de talento. ¿Qué aspectos pueden hacer que un programador se decante por una compañía en lugar de por su competencia?

En primer lugar, el teletrabajo.  Aunque el porcentaje de trabajo presencial y en remoto puede ser negociable, se debería partir de un mínimo de dos días a la semana de teletrabajo.  No debemos olvidar que el tipo de trabajo que realiza un programador requiere de un nivel de concentración que, generalmente, les resulta más sencillo conseguir en su propia casa.

Además, hay que tener en cuenta que se trata de un tipo de perfiles que valoran especialmente la conciliación, por lo que se sentirán más atraídos por compañías con políticas sólidas que les permitan alcanzan un equilibrio entre su vida personal y profesional.

Para atraer a los programadores también son determinantes las posibilidades de desarrollo que les ofrezca la empresa, ya que estos perfiles tecnológicos suelen valorar el poder seguir aprendiendo; sin olvidar, por supuesto, una oferta salarial competitiva.

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Summary

Los programadores son los responsables de desarrollar páginas web, aplicaciones para móviles, programas de ordenador o de ciberseguridad. ¿Y qué se necesita para esta posición? Aunque existen diferencias en función del perfil, a nivel general las compañías demandan habilidades técnicas, como especialización en un lenguaje de programación, habilidad de aprendizaje sobre nuevas tecnologías o capacidad para interpretación de la tecnología, así como soft skills como capacidad de análisis y de escucha o aptitud para trabajar en equipo en entornos colaborativos.

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